El presidente Álvaro Uribe hizo la revelación este jueves durante su intervención en el Congreso de Fedepapa, que se desarrolló en Bogotá.
Uribe señaló que antes de llegar al evento sostuvo una reunión con un testigo de ejecuciones extrajudiciales ocurridas en Ocaña.
"Ese testigo ha traído unas pruebas bien significativas de que en 2006 y 2007 (...) bandas del narcotráfico de la región penetraron la Brigada y consiguieron alianzas con sectores de la Brigada para poder avanzar en el negocio ilícito de la coca", sostuvo el jefe del Estado.
Según la confesión, después del pacto que hicieron con los delincuentes, los militares "para aparentar que sí perseguían a los narcotraficantes asesinaron personas inocentes".
El testimonio fue oído también por el ministro de Defensa, Gabriel Silva Luján, y por Cristian Salazar, delegado para los derechos humanos de la ONU y en cuya oficina se desarrolló la reunión con el testigo.
Fue en Ocaña donde el Ejército presentó como delincuentes abatidos en combate los cadáveres de más de una docena de jóvenes, que fueron sacados con engaños del municipio de Soacha, vecino de Bogotá.
Uribe remitió el testigo a la Fiscalía, que investiga unas 1.200 denuncias de estas ejecuciones extrajudiciales, conocidas como ‘falsos positivos'.